Una de las máximas que debemos seguir si tenemos un negocio es intentar siempre estar a la última en lo que respecta a tecnología o avances tecnológicos.
Lo digital está avanzando a un ritmo frenético y comiendo cada día más terreno a lo físico. El número de negocios online crece cada vez más, al igual que el número de usuarios y clientes que eligen hacer sus compras en ellos.
Hablar del fin de los negocios físicos es exagerado, de hecho, son y siguen siendo un pilar fundamental de la economía. Pero sí que podemos hablar de una tendencia cada vez mayor de negocios que combinan ventas físicas con ventas online para cubrir mayor campo y ofrecer más facilidades a sus clientes.
La digitalización es, por tanto, un punto casi obligatorio para cualquier negocio que quiera evitar el estancamiento y apunte a seguir siendo competitivo y moderno.
Si no sabes por dónde empezar o aún tienes dudas de en qué consiste la digitalización de un negocio, a continuación, podrás encontrar 5 tips que pueden ser muy útiles a la hora de trazar tu plan de digitalización.
4 Tips Para Que Tu Negocio De El Salto Hacia La Digitalización
1. Estudia y conoce a fondo tu negocio
Si no conoces tu negocio como la palma de tu mano, el proceso de digitalización va a ser más complejo y largo de lo normal. Hay que dar un paso atrás y ser conscientes de la magnitud del proceso para realmente tomar conciencia de lo que se va a realizar.
La estructura, procesos y manera de trabajar va a cambiar drásticamente. Habrá que realizar muchos cambios significativos y debemos saber cómo y dónde se pueden hacer exactamente.
Como cada negocio funciona y trabaja de una manera distinta, el plan de digitalización también será único y particular para cada negocio. Podemos, por tanto, tomar inspiración de otras empresas y negocios, pero el plan en última instancia debe estar hecho a la medida de nuestro negocio.
Solamente estudiando todo su funcionamiento, podremos crear un plan que sea objetivo, realista y que realmente aplique mejoras que vayan a ser útiles.
Debe incluir desde el inicio del proceso, que según el negocio puede ser la producción o la adquisición del producto, hasta la llegada al cliente final y su posterior evaluación del proceso.
Todo debe ser observado con detenimiento, ya que seguramente habrá varios procesos que se verán beneficiados con la digitalización. Puede ser ahorrando en tiempo, personal o ganando en comodidad, lo importante es que haya una mejora sustancial respecto a la manera de hacerlo previamente.
2. Apóyate en softwares
Gran parte del proceso de digitalización de un negocio pasa por la elección de programas que nos ayudan a digitalizar procesos y, así, conseguir ser más eficientes y productivos.
Es normal que con una simple búsqueda preliminar encuentres miles y miles de resultados y software distintos. También es normal verse sobrepasado ante la cantidad de oferta.
Pero es valioso mantener la cabeza fría y tener nuestro objetivo en mente. Tendremos que filtrar entre los programas que realmente necesitamos.
Una vez hecho, decidir en qué nos basaremos para decantarnos por un programa u otro. Puede ser por los comentarios y valoraciones positivas, el precio, sus funcionalidades, la personalización, etc.
Lo realmente fundamental es que a la hora de tomar la decisión esté suficientemente fundada y estemos convencidos de haber elegido la mejor opción.
No se trata solamente de elegir un software. El proceso de digitalización afecta a la totalidad del negocio y probablemente sea necesario seleccionar varios que nos ayuden a automatizar funciones y simplificar tareas.
No necesariamente debe ser un programa supercomplejo. Algo sencillo, fácil de usar, pero muy útil como el programa para generar facturas para autónomos de Holded es un claro ejemplo de ello. Extremadamente útil y, a la vez, sencillo e intuitivo.
Otro ejemplo de software útil, eficaz, pero simple e intuitivo es Klippa. Según la guía de los mejores programas OCR, uno de los mejores que puedes encontrar en el mercado. Te ayudará a digitalizar todos los documentos físicos que tengas y poder trabajar de manera 100% digital.
Sin perder de vista el objetivo principal de la aplicación de estos software a tu negocio, que es la simplificación y automatización de procesos, debemos elegir el que más nos ayude y mejor se adapte a la situación.
Si ya has realizado el análisis a fondo del punto anterior, no deberías tener problemas para individual y elegir la mejor opción para tu negocio.
3. Crea un sitio web y una tienda online
Evidentemente, parte de la digitalización de un negocio pasa por el e-commerce o venta online. Y para poder vender online, además de tener una estructura digital que funcione correctamente, es necesaria una plataforma en la que ofrecer nuestros productos.
Se puede utilizar un marketplace o plataforma ya creada en la que vender nuestros productos a cambio de un porcentaje de la venta que se queda la plataforma. Es una opción sencilla, rápida, fácil de crear, pero quizás menos rentable e independiente.
La opción más popular en estos casos es crear una tienda online propia. Si bien la carga de trabajo y la inversión inicial puede ser mayor, nos da mayor independencia, libertad para hacerla a nuestro gusto y también una imágen de seriedad. Tener nuestra propia tienda es indicativo de un negocio digitalizado.
Para ello, deberemos tener un sitio web al que enlazar la tienda. Damos por hecho que tu negocio ya tiene uno, ya que es algo indispensable, tengas un e-commerce o no.
Todo negocio debe tener un sitio web puesto que le da presencia online. Si una persona busca el nombre de nuestro negocio y no encuentra más que directorios genéricos, la imagen que refleja es muy pobre. Incluso puede pensarse que el negocio ya no existe.
Tener una página web activa y con información relevante es el punto de partida. A continuación viene la tienda online en la que debemos ofrecer nuestros productos de manera clara, sencilla y todas las facilidades posibles.
Siempre es importante tener en cuenta prácticas de SEO que nos ayuden a estar mejor posicionados. El uso de palabras clave, textos alternativos o un tiempo de carga reducido ayudará a que los buscadores tengan a la web de tu negocio en consideración.
También se puede contemplar el empleo de SEM para, a través de las herramientas de pago, estar mejor posicionados y apuntar a un perfil demográfico particular.
4. Utiliza redes sociales
Al igual que tener un sitio web nos da presencia online, lo mismo sucede al tener perfiles activos en las distintas redes sociales.
Se trata de un método genial para captar y estar en contacto con los clientes. Hacerles participar en el negocio, que estén al corriente de las últimas novedades y también leer de primera mano sus comentarios y sugerencias.
Además, al igual que sucede con un sitio web, tener un perfil activo, actualizado y al día da una imagen profesional y positiva de cara a los clientes.
Sin embargo, hay que elegir correctamente en qué red social abrir un perfil. Dependiendo del negocio puede que no todas sean aptas y, contrariamente a lo que se puede pensar, tener un perfil en todas las redes posibles no siempre es necesario.
Existen algunas más generales, como pueden ser Instagram o Facebook, donde se pueden realizar publicaciones en distintos formatos y de distintos tipos. El público es general, el rango etario es bastante amplio y puede proporcionarnos una visibilidad considerable.
Otras redes, como Twitter, Pinterest o TikTok, son más especiales. Funcionan sobre todo con un solo formato (texto, imágenes y video respectivamente) y son redes en las que la gente no está tan abierta a las ofertas comerciales. Si bien hay casos de éxito, se requiere una mayor adaptación al formato y, con ella, más tiempo y dedicación, del que no siempre se dispone.
Finalmente, están algunas, como puede ser LinkedIn, que se centran más en el mundo laboral. Tener un perfil en LinkedIn puede ser útil, ya que nos puede servir para crear contactos con otras empresas o trabajadores, buscar oportunidades o, incluso, personal nuevo.
5. Conclusión
Como habrás podido ver, hay algo en común en casi todos estos pasos y es que todos los esfuerzos están centrados en el cliente. Nuestro negocio necesita a los clientes para sobrevivir, por lo que todas las acciones deben girar en torno a ellos.
Esto incluye la digitalización de procesos internos. Si bien el objetivo principal es mejorar los procesos, automatizarlos y hacer de nuestro negocio un sistema más eficaz y productivo, el fin último es brindar un mejor servicio a los clientes.
Un negocio más productivo es más rentable, nos permite responder mejor a las necesidades de los clientes y reducir los precios.
En resumen, no podemos descuidar a los clientes. De igual manera que nuestro negocio debe ser el principal beneficiado de la digitalización, los clientes son quienes ocupan el segundo lugar justo después.
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